Lograr y mantener una vida escolar pacífica y armónica, donde cada integrante, más allá de sus circunstancias individuales, sea respetado y apreciado, es responsabilidad de toda la comunidad educativa, que ha de dotarse de una cultura activa de conciencia y prevención que impida que surjan comportamientos de acoso.

 

El alumnado con discapacidad, como acreditan los datos disponibles, está especialmente expuesto a sufrir hostilidades, hostigamientos y abusos por lo que ha de estar protegido, formando parte en posición preferente de todas las estrategias contra el acoso en le medio escolar.

 

El CERMI recuerda a la comunidad educativa que dispone de la “Guía contra el acoso escolar por razón de discapacidad”, elaborada como recurso digital de lucha contra cualquier expresión de violencia en el entorno escolar.

 

La guía del CERMI define, genéricamente, el acoso escolar, para detenerse más en concreto en el que está asociado a motivos o razones de discapacidad, aboga por implantar la educación inclusiva –exigida por la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad-, como factor preventivo de cualquier forma de violencia, enuncia y describe las herramientas para hacerle frente, informa del marco normativo de contexto, así como de los recursos disponibles en la comunidad educativa para enfrentar las conductas de acoso.

 

Enlace a la guía